El sacerdote Jesús Pereña Luis, quien desempeñó el cargo de párroco en la localidad de Castellanos de Moriscos durante dos décadas, desde 1985 hasta su retiro, ha fallecido a la edad de 93 años.
Jesús Pereña nació en Aldeadávila de la Ribera y, según la Diócesis de Salamanca, su vida estuvo marcada por su profunda dedicación a la enseñanza y a la investigación teológica.
En respuesta a su vocación religiosa, ingresó al Seminario y fue ordenado presbítero en la ciudad de Salamanca el 20 de junio de 1955. Cuatro años después, obtuvo el doctorado en Teología por la Universidad Pontificia de Salamanca, presentando su tesis titulada “Naturaleza y trascendencia de la voluntad antecedente”.
Desde el inicio de su ministerio sacerdotal, Jesús Pereña ejerció como profesor de Geografía e Historia en el Seminario diocesano. En 1956, se embarcó en una misión en Paraguay junto a otros sacerdotes, donde compartió su sabiduría y enseñanzas como profesor durante cinco años en el Seminario conciliar de Asunción, contribuyendo significativamente a la formación de futuros sacerdotes. Posteriormente, regresó a España y asumió el cargo de profesor de Religión en el Instituto Lucía de Medrano de Salamanca.
El legado del sacerdote Jesús Pereña Luis perdurará a través de las vidas de aquellos a quienes enseñó y aconsejó a lo largo de su carrera dedicada a la educación y la investigación teológica. Su comunidad y la Diócesis de Salamanca lamentan su pérdida y honran su contribución a la fe y la educación.
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