En un nuevo giro en el caso que ha generado atención mediática, la Policía Nacional detuvo nuevamente en la tarde del domingo en Valladolid a Lucas Burgueño, un bombero de la Diputación de Salamanca que anteriormente había increpado al exalcalde de Valladolid y diputado Óscar Puente. Esta detención se llevó a cabo por presuntos delitos de revelación de secretos, coacciones, amenazas y daños.
Según fuentes del Cuerpo Nacional de Policía (CNP), la detención se produjo debido a una orden de búsqueda, detención y comparecencia emitida tras una denuncia presentada el mismo día contra Burgueño por su presunta implicación en los mencionados delitos. Además de esta denuncia, Burgueño también enfrentaba otra por impago de una deuda de más de 400 euros en un establecimiento de hostelería.
Familiares del detenido expresaron su deseo de presentar una denuncia adicional por la difusión de un vídeo en el que se le acusa de requerir una cantidad de dinero a las personas afectadas. Según los familiares, Burgueño habría amenazado con enviar personas a ocupar su vivienda, causando destrozos en el botiquín y dañando la caldera de gas, lo que la dejó inutilizable. Los agentes confirmaron que el vídeo había sido difundido a al menos seis personas y que la caldera de gas estaba efectivamente dañada, lo que llevó a emitir una orden de búsqueda en su contra.
El detenido compareció ante la Autoridad Judicial en la mañana del lunes como parte del proceso legal en curso.
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